(Fuente El Emergente.com /
Por Ignacio Serrano) República Dominicana es una potencia
mundial en el deporte de alta competencia, gracias a sus peloteros. Pero
todavía hay una deuda que no ha podido cobrar. Ese boleto por pagar está ya en
sus manos y es la posibilidad de conquistar, por fin, la medalla olímpica en el
beisbol.
Llama la atención que
Quisqueya haya sido el último país clasificado a los Juegos de Tokio 2021.
Fueron tres las oportunidades, incluyendo dos fallidas en el Premier 12 y en el
Torneo de Las Américas. Pero este fin de semana ocurrió lo que la lógica
dictaba con mucha anterioridad.
La embajada dominicana en la
MLB es la más prominente entre todas las nacionalidades ajenas a los Estados
Unidos que hacen vida en las Ligas Mayores. Desde estrellas consagradas de
todos los tiempos, como Albert Pujols, hasta varios de los más emocionantes
jóvenes que dominan hoy el Big Show, la nación del Caribe es protagonista
principal en la Gran Carpa.
Pero no es solamente allí
donde resuena el merengue al ritmo de batazos, atrapadas y envíos con malicia
hacia el home.
Doquiera que se vea, sea en
México, Italia o Japón, en cada liga profesional del planeta, muchos de los
mejores jugadores extranjeros tienen pasaporte quisqueyano.
Dominicana ganó finalmente
el derecho a ser uno de los seis países presentes en el diamante de estos
próximos Juegos Olímpicos, al superar a otra potencia, Venezuela, en el
repechaje final.
Únicamente los anfitriones
japoneses, más Corea del Sur, Estados Unidos, Israel, México y ahora los
antillanos gozan del derecho de participar en la cita universal. Ninguno de los
dos latinoamericanos ha conseguido una presea en esa cita, jamás.
Cuba aprovechó las
particularidades del beisbol en su momento para lograr tres medallas de oro y
dos de plata en las cinco ediciones disputadas. La entrada en acción de los
jugadores profesionales acabó con el predominio de los antillanos, sin embargo.
Su Selección Nacional ni siquiera pudo clasificar esta vez al repechaje final.
Japón será el gran favorito
ahora y el principal enemigo a vencer. Contará con un verdadero Todos Estrellas
de la exigente NPB, el segundo circuito más competitivo del globo después de
las Grandes Ligas.
Pero eso puede convertirse
también un punto fuerte para Dominicana. Jugadores suyos brillan actualmente en
los campos nipones y figuran entre los mejores jonroneros y lanzadores.
Se espera que las ligas de
México y Japón hagan una pausa desde finales de julio y hasta el 7 de agosto,
cuando se disputará el oro. Habrá permisos a granel y Quisqueya podrá sumar
nuevos y mejores peloteros.
Ninguna otra representación
de América Latina aparte de Cuba ha logrado una medalla en los Juegos
Olímpicos. México afronta ese desafío. Pero en el caso de los dominicanos es
algo mucho más urgente. Es una deuda pendiente. Lo único que les falta por
ganar.
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