(Fuente vía LVBP.COM / Por Alexander Mendoza) Rougned Odor viene de una temporada difícil. Inició la campaña sumido en un profundo slump y al final logró repuntar. Los Rangers de Texas no quieren volver a ver esos sube y baja, necesitan a un bateador que pueda ser más consistente y que su enfoque en el plato dé un giro, para que pueda aprovechar todo el potencial que posee.
Odor piensa que puede dejar
esa inconsistencia en el pasado y retomar las cosas que le dieron resultado en
septiembre del año pasado.
Entre marzo y mayo del año
pasado, su línea ofensiva fue de apenas .161/.231/.329, en sus primeros 42
encuentros, pero con una temporada de 162 encuentros, el manager Chris Woodward
pudo esperar a que reaccionara. Con el nuevo calendario, de 60 encuentros,
obligado por la crisis sanitaria originada por la Covid-19, el equipo no tendrá
tanta paciencia, si Odor es víctima de una sequía ofensiva y el marabino seguro
irá al banco.
Esa posibilidad, que también
estuvo rondando el año pasado, puede servir de acicate a Odor. El toletero
zurdo cerró 2019 ligando para .263/.340/.632, con nueve jonrones y 26
remolcadas, en sus últimos 26 encuentros.
Regresó con ese impulso en
la primavera y en 12 juegos de exhibición en la Liga del Cactus se fue de 31-11
(.355), incluidos un doble, un triple y dos cuadrangulares, que le ayudaron a
remolcar nueve anotaciones, mientras que su OPS fue de 1.039.
El parón por la pandemia
tampoco le afectó y después de la jornada del jueves en el Campamento de
Verano, que se desarrolla en el Globe Life Field, el venezolano golpea de 12-6,
con un biangular, dos vuelacercas y dos boletos, en seis juegos, entre partidos
simulados e interescuadras.
“No me gusta hablar de mí
mismo”, comentó Odor a MLB.com el jueves, después de un juego interescuadras en
el que sacudió jonrón contra su compañero Corey Kluber. “Pero les voy a decir
algo: Me siento muy bien en el plato y siento que lo que hice al final del año
pasado lo he traído a este”.
Woodward debe estar
satisfecho o al menos disfrutando lo que está viendo de su camarero.
“Esa pelota venía con mucha
velocidad hacia él”, dijo Woodward sobre el envío que Odor envió a las gradas.
“Para sacara del parque, cómo iba rotando la pelota, habla de cuán duro le
pegó”.
Si la zafra comenzara hoy,
Odor se encontraría en el tope de sus condiciones.
“Estoy listo para arrancar”,
puntualizó Odor. “No quiero tomar un día libre. Tan pronto como comience la
temporada, quiero estar listo para la acción. No puedo esperar a que esto
comience”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario